Uno de los pasajes que el apóstol Pablo citó y en los cuales muchos hallan tropiezo. Dios presenta en él -a través del salmista-, dos pueblos: la generación de sus hijos, que son justos, a los cuales Él defiende; y los necios, todos ellos corrompidos, pecadores y deseosos de acabar con el pueblo de Dios. 

LETRA 

/Dice el necio en su corazón: 

No hay Dios/ 

Se han corrompido, hacen obras abominables; 

/No hay quien haga el bien/ 

/Yahvé miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, 

Para ver si había algún entendido, 

Que buscara a Dios/ 

Todos se desviaron, a una se han corrompido; 

No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. 

//¿No tienen discernimiento todos los que hacen iniquidad, 

Que devoran a mi pueblo como si comiesen pan/ 

/Y a Yahvé no invocan?// 

Ellos temblaron de espanto; 

Porque Dios está con la generación de los justos. 

Del consejo del pobre se han burlado, 

Pero Yahvé es su esperanza. 

 

/Dios está con la generación de los justos/ 

El que justifica al impío, y el que condena al justo, 

Ambos son igualmente abominación al Señor. 

 

/Dios está con la generación de los justos/ 

Todo aquel que hace justicia es nacido de Dios 

Y que nadie los engañe, porque justo es el que hace justicia 

 

/Dios está con la generación de los justos/ 

Justo no es el pecador que cree, pero no muere al pecado 

Justo es el que hace justicia porque ha nacido de Dios 

 

/Dios está con la generación de los justos/ 

Entre los hijos de los hombres, no hay justo ni aun uno 

Pero entre los hijos de Dios, todos son justos, no hay injustos 

 

/Dios está con la generación de los justos/ 

Hay dos pueblos en el mundo: los hijos de Dios y los hijos del diablo 

Todos los hijos del mal /son injustos/ 

 

///Dios está con la generación de los justos///